Ðark Lady

Acerca de tødø y nada a la vez

Addicted


Y es posible que sea adicto
A dónde y cómo aterrizas en tus pies
Sí, es posible que sea adicto
A cómo logras sacar lo mejor de mí

Y bueno, como el pony regresó en gloria y majestad, tengo que darle música feliz que le guste y lo haga correr por la pradera o flotar en su nube rosada. Esta canción de Morgan Page y Greg Laswell es lo que se dice genial, pero tan N.N que se pierde entre tanta cosa que anda dando vuelta por ahí. Yo me declaro fan absoluta de Greg y su aterciopelada voz, aunque no lo conozca nadie. A la tal Morgan no la había escuchado ni en pelea de perros y la canción brillaba por su ausencia en Goear, por lo que con esos antecedentes me vi en la imperiosa necesidad de subirla para que alguien la escuche hasta que se aburra, como yo.

La letra de la canción es como esas que me gustan: mamona con estilo. Y pasa lo mismo de siempre... O mejor dicho lo que a mí me pasa siempre con esas historias de futuro incierto que te dejan esperando mientras te preguntas si estás haciendo lo correcto y si algún día funcionará. Con ese tipo de cosas, a veces me pregunto si Penélope es mi segundo nombre.

En una parte Greg canta con decisión “Lo digo en voz alta 'esta es la última vez'”, pero al final queda en nada, porque él sabe que a la hora de los quiubos uno se va a la cresta y sigue igual de baboso. A quién no le ha pasado digo yo. 

En fin, ese sería mi aporte a la sociedad en este momento.


Despertando de la pesadilla



Estoy completamente despierta 
Sí, estaba en la oscuridad 
Estaba cayendo con fuerza con el corazón abierto 
¿Cómo pude leer las estrellas tan mal? 
Y ahora está claro para mí 
Que todo lo que ves no siempre es lo que parece 
Sí, estuve soñando por tanto tiempo 

Desearía haber sabido entonces, lo que sé ahora 
No me habría sumergido 
No me habría doblegado 
La gravedad duele 
Lo hiciste ver tan dulce 
Hasta que me desperté en el pavimento 

Cayendo del cielo 
Estrellándome desde lo alto 
Lo estoy dejando ir esta noche 
Sí, estoy cayendo desde el cielo 

Estoy completamente despierta 
Sin perder el sueño 
Recogí cada uno de los pedazos 
Y aterricé en mis pies 
No necesito nada para sentirme completa
Sí, nací de nuevo 
Salí de la cueva del león 
No tengo que fingir 
Y es demasiado tarde
La historia ya terminó
El fin 

Desearía haber sabido entonces, lo que sé ahora 
No me habría sumergido 
No me habría doblegado
La gravedad duele 
Lo hiciste ver tan dulce 
Hasta que me desperté en el pavimento 

Cayendo del cielo (Fue algo inesperado) 
Estrellándome desde lo alto 
Lo estoy dejando ir esta noche (sí, estoy dejándote ir) 
Sí, estoy cayendo desde el cielo

Estoy completamente despierta 
Truenos retumbando 
Castillos derrumbándose 
Estoy intentando resistir 
Dios sabe que traté de ver el lado positivo 
Pero ya no estoy ciega 

Mi pony ha vuelto y eso me tiene muy contenta, como no lo he estado en mucho tiempo. No sé si fue porque leí varios libros de gente “loca” (por no decir “con problemas mentales”) o porque me hice un machitún liberador de energías negativas, pero siento que estoy despertando de nuevo. O quizás fue porque recordé algunas cosas que decía de Paulo Coelho (al que todos odian, pero que a mí me encanta porque creo en las cosas raras que él cree) y que más de alguna vez me han ayudado. O tal vez simplemente me aburrí de estar con el ánimo por el suelo, no lo sé, la cuestión es que me siento mejor y con más fuerzas. 

No tengo mucha claridad sobre lo qué haré o dejaré de hacer, pero si sé que no abandonaré el camino que ya elegí. No queda otra más que aguantar lo que venga. Yo puedo no creer en muchas cosas, pero sí creo que en el destino y así como las personas se inclinan ante Dios y dicen “Hágase tu voluntad”, pues yo le digo lo mismo al Universo. Me pongo a su disposición, aceptando lo que estime conveniente, porque a fin de cuentas lo único que quiero es ser útil a través del don que me entregaron: saber plasmar emociones e historias en un papel. Así que haré lo que el Universo quiera que haga, aún cuando no entienda su lógica. 

He sido egoísta, irresponsable y demasiado impulsiva, pero ya aprendí la lección. Tengo que ser más humilde y dejar de ser tan terca, porque yo misma me voy haciendo encerronas al ver solo lo que me conviene. 

Pero por sobre todas las cosas, no debo volver a perder la confianza en mí misma. 

Nunca más. 

Ahora solo hay que dejar entrar la luz y comenzar a cumplir con mi misión en la vida: Escribir.